La paciencia es una virtud muy valiosa.

La paciencia es una virtud
La paciencia es una virtud

La paciencia es una virtud muy valiosa.

Ser paciente es una habilidad, una herramienta que todo ser humano posee. La diferencia esta en que unos mas desarrolladas que otros. Ser paciente es una constante del día a día, que enfrenta diversas situaciones. De hecho gracias a la paciencia la mayoría de las situaciones se hacen más llevaderas.

Técnicamente la paciencia se define como la capacidad de soportar algo sin alterarse, o alterándose de manera imperceptible. Para los orientales la paciencia se relaciona con la fortaleza del carácter. Piensan que cuanto mas maduro y evolucionado en personalidad, mas fácil de mantener la calma en cualquier situación.

En el budismo existe un claro ejemplo de la paciencia. Buda, fundador de la religión budista, permaneció seis años en ayuno, y finalmente decidió a los pies de una higuera de la India a no levantarse de allí hasta haber alcanzado la luz.

Cultivar la paciencia es bueno para las personas, ya que ayuda a regular el estrés y educar el carácter. Y a pesar de ser una cualidad como cualquier otra, muy pocos saben cómo ponerla en práctica.

En ocasiones el que tiene paciencia es tildado de lento o raro, por el simple hecho de tomarse las cosas con calma y esperar su turno. En un mundo cada día mas revolucionado donde no se ve la paciencia, es difícil que las personas se detengan ante sus impulsos.

La paciencia es una virtud importante de cultivar.

Cada día es mas común ver como hasta los niños se dejan llevar por sus impulsos a veces irracionales del momento, y muchas veces luego se arrepientes por lo que sucedió. Sin embargo ya paso y no queda más que asumir las consecuencias. Lo peor de esto es que se convierte en un círculo vicioso, ya que actúa por impulso, se arrepiente, pero vuelve actuar impulsivamente.

Hasta la naturaleza dispone de esta sabia virtud, los mas altos y bellos arboles no nacieron de un día para otro, requirieron de años y años para llegar a mostrar todo su esplendor.

Al contrario de los que muchos creen, la paciencia no es ser alguien pasivo. Es activa ya que requiere de fuerza concentrada, de mucha voluntad y auto control.

Poseer la virtud de la paciencia no significa esperar que los sueños me caigan del cielo, es ir tras ello sin llevarse a nadie por delante, ni andar reaccionando por todo. La paciencia te brinda la oportunidad de vivir tranquilo sin sentirte afectado por la vida que otros decidan llevar.

“Si tiene que ser será, cuando tenga que ser será”