Como el estrés infantil incide en el proceso de maduración del cerebro en los adolescentes

Como el estrés infantil incide en el proceso de maduración del cerebro en los adolescentes
Infancia

Como el estrés infantil incide en el proceso de maduración del cerebro en los adolescentes

Según los resultados arrojados por un estudio a largo plazo hecho por expertos de la Universidad Radboud Nijmegen en los Países Bajos; vivir con estrés en la infancia puede apresurar la maduración de determinadas áreas del cerebro en la adolescencia.

Parte del estudio consistía, en 1998, alistar por parte de los científicos a 129 participantes de un año para ser observados por las venideras dos décadas. El grupo de expertos analizó sus juegos y como convivían con sus padres, amigos y compañeros del colegio. También suministraron escaneos de resonancia magnética (MRI).

Se estudiaron dos clases de agentes estresantes. Los momentos vitales negativos, las influencias negativas del contexto social, conforme su conmoción en la primera infancia y adolescencia. Ambos grupos etarios se establecieron como de 0 a 5 años y de 14 a 17 años respectivamente.

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Adolescencia

Como el estrés infantil incide en el proceso de maduración del cerebro en los adolescentes

Los participantes aproximadamente de 13 años, se les solicitó que llenaran una lista de confirmación de situaciones de violencia. Tales como escuchar disparos, golpizas, observar a alguien consumir estupefacientes, ser testigo de un arresto. Y también observar que alguien es amenazado con una golpiza o apuñalamiento.

Estos aspectos fueron anexados al estudio; con el objetivo de hacerse de una idea general de cuanta agresión había observado cada adolescente en su localidad. Alrededor de cuatro años posteriores a realizar la encuesta de violencia en la comunidad; se les pidió a 22 que se realizaran un examen de resonancia magnética (MRI).

Los investigadores hallaron que en la infancia, las situaciones negativas tales como el divorcio de los padres y las patologías, se asociaron a una maduración más acelerada de la corteza prefrontal y la amígdala en la adolescencia.

En otro orden de ideas, las influencias negativas del contexto social en la adolescencia como la poca estima de los compañeros en el colegio; se vincularon a una maduración más tardía del hipocampo y otra zona de la corteza prefrontal.

Dichas zonas del cerebro son trascendentales en la manera en que las personas actúan en circunstancias sociales y emocionales. Ademas estas áreas son susceptibles al estrès.

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