¿Por qué nos estresamos?

El

El “estrés”; un término que se ha convertido parte de la cotidianidad del ser humano. Aunque es una palabra que no se ha tratado durante mucho tiempo con el debido tacto y respeto que se merece; en ciencias como la física y la matemática, desde tiempos ancestrales sobre el uso de la presión sobre algunos materiales, y como está ocasionaba la destrucción de muchos. Por tal motivo, podemos asociar dicha “presión” a nuestra vida diaria, y cómo de esta manera, podemos ir descubriendo por qué nos estresamos con facilidad.

¿Nos estresamos ante los estímulos sensoriales?

Lo que anteriormente no era estudiado; era la respuesta que tiene nuestro organismo ante la presencia de esa presión, llamada estrés. Desde la presencia de vida humana en la Tierra; el hombre, ha tenido que soportar una serie de situaciones que han puesto en peligro su supervivencia y bienestar, por lo que, la búsqueda de un estado de confortabilidad ha siempre estado presente.

Hoy en día; al igual que desde la prehistoria, nos enfrentamos a situaciones que pueden poner en riesgo nuestra integridad; el hecho de estresarnos, es un estímulo de nuestro organismo, para tratar, de cierta forma de responder con rapidez y solventar cualquier clase de problema, que en algún momento dado nos esté afectando.

Cuando estamos siendo sometidos a situaciones estresantes; podemos notar cambios en nuestro cuerpo, en especial; en la temperatura. Una situación de estrés moderado que se prolongue por mucho tiempo, puede acarrear consecuencias desastrosas. Sobre todo; en nuestra salud, la aparición de enfermedades de origen crónico, son sin duda, la representación de todo aquella clase de situaciones que se acumulan y merman de forman negativa nuestro cuerpo.

Y entonces, por qué nos estresamos:

  • Porque no vemos soluciones ante una situación que nos atormenta.
  • Por pensar que no podemos relajarnos bajo ninguna circunstancia.
  • Creemos no poder controlar una situación tensa.
  • No encontramos beneficio alguno ante la situación, o las situaciones.
  • No somos capaces de confiar nuestros problemas y angustias.