¿Qué tan efectiva será la psicología inversa con los niños?

Psicología inversa con los niños
Psicología inversa con los niños

¿Qué tan efectiva será la psicología inversa con los niños?

La psicología inversa se refiere a decirle, a un niño en este caso, hacer exactamente lo contrario de lo que debe o se desea que haga. Los expertos recomiendan utilizar esta técnica en niños de dos a tres años. Momento en el cual atraviesan una etapa de rebeldía donde se niegan a todo.

Cuando el niño atraviesa los dos y tres años dice no a todo, esta rebeldía busca reforzar su identidad y sentir que se tiene control de todo. En otras palabras el niño quiere gobernarse y no que un adulto le diga que hace.

Claro esta, la técnica podría ser de utilidad si es usada de forma puntual. Esto se debe a que un uso inadecuado o abusivo de la técnica hace que pierda eficacia. Además que no se debe acostumbrar al niño a tratarlo con engaños, ya que cae en la manipulación. Los especialistas dicen que debe ser utilizada solo en caso de que ocurran rabietas o reacciones agresivas en el niño.

Psicología inversa con los niños
Etapa de rebeldía

Algunos cuestionan utilizar esta técnica ya que si implica engaño y manipulación no es lógica utilizarla. Sin embargo, la crianza de un niño es más difícil de lo que se cree. Como decir antes de ser padres que no dejaras ver televisión a tu hijo hasta que tenga tres años, probablemente termines dejándole ver televisión mucho antes.

Sabina Rio, psicóloga comenta:

[su_quote]”Los padres no siempre disponemos de tiempo ni paciencia a la hora de decirle a un hijo que haga algo; y es entonces cuando recurrimos a este tipo de técnicas a la desesperada. Como: gritos, amenazas, chantajes, premios o castigos que tampoco son los modos idóneos para educar a un niño, pero que, de todas formas, a veces aparecen”[/su_quote]

Psicología inversa con los niños

Un buen momento para usar esta técnica es al momento de comer, que muchas veces se convierten la hora de la locura. Suele ser más efectiva en niños muy tercos, aquello que a pesar que no han comido por llevar la contraria insisten en no comer y no comer. Usted el padre muy calmadamente y convencido de lo que esta diciendo, dígale no quieres comer, déjalo allí, me lo voy a comer yo para poder comerme el postre, además me voy a poner muy inteligente, bonita y fuerte. Pobre de ti te pondrás feo y flaquito porque no comes.

El niño se creara un conflicto interno en el que se cuestionara el quedarse por detrás; lo cual le llevara a mejor acceder. ¿Tienes hijos? ¿Qué piensas de esta técnica?

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