Todo lo que debes saber para solicitar la Tarjeta Sanitaria Europea

solicitar la tarjeta sanitaria europea

Cuestionarse sobre una posible eventualidad que pueda afectar nuestro estado de salud durante un viaje al extranjero, nunca fue tan preocupante como en los tiempos actuales. Por mucho que pensemos que el huracán generado por el COVID-19 ya es cosa del pasado, la gran realidad es que vivimos con un miedo latente que no se termina de disipar. Especialmente, cuando la aparición de nuevas variantes que podrían disminuir la eficacia de las vacunas es “pan de todos los días”.

El hecho es que, sí contar con cobertura sanitaria en el extranjero era un requisito optativo, pero necesario ante la idea de un viaje de negocios, estudios o placer de cualquier persona, actualmente podríamos decir que es totalmente indispensable. Afortunadamente, como españoles podemos disponer de los beneficios que otorga la Tarjeta Sanitaria Europea, un documento que facilita la atención médica hospitalaria en cualquier país miembro de la UE.

Si todavía no te has hecho con ella, en este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber para solicitarla, así como algunas restricciones que debes tener presente para hacer uso de este documento.

¿Qué es la Tarjeta Sanitaria Europea?

cartilla sanitaria europea
La TSE facilita la atención médica hospitalaria por el período de tiempo que sea necesario, en cualquiera de los 27 países miembro de la UE.

También conocida como cartilla sanitaria europea o TSE, se trata de un documento de carácter individual e intransferible que acredita a su portador para recibir atención médica hospitalaria en la red salud pública de cualquier país de Unión Europa dónde se encuentre.

Dicha prestación sanitaría se dará durante el tiempo que sea necesario y bajo las mismas condiciones de un ciudadano de dicho país, por lo que nunca está de más que antes de viajar se investigue un poco las diferencias entre el sistema sanitario de España y el del lugar de destino.

Los países dónde la Tarjeta Sanitaria Europea garantiza la atención pública hospitalaria son: Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, Rumania y Suecia. También incluye Reino Unido y salvo algunas restricciones, los siguientes países sujetos al tratado de libre comercio: Islandia, Liechstenstein, Noruega y Suiza.

¿Cómo pedir la Tarjeta Sanitaria Europea?

Para solicitar tarjeta sanitaria europea existen tres medios posibles. A través de Internet, que es quizás el método más rápido para obtenerla de forma segura, de manera presencial en algún Centro de Atención e Información de la Seguridad Social (CAISS) cercano o también, vía telefónica. 

En cualquiera de los tres casos, el tiempo de llegada no debería superar los diez días hábiles, para ello es indispensable mantener los datos de contacto y direcciones postales actualizadas, más aún si lo que se desea es renovar la tarjeta sanitaria europea y se ha realizado un cambio de domicilio o cualquier otro dato importante.

En el caso de renovaciones, lo recomendable es realizarla previo a los 30 días de su vencimiento.

Lo que debes tener en cuenta sobre la TSE

Teniendo en claro su utilidad, así como las vías de solicitud, es necesario tener en consideración lo siguiente:

  • Individual e intransferible: hijos pequeños o menores a cargo, deben portar su propia TSE.
  • Validez: la TSE tiene una vigencia de dos años desde su recepción, su fecha de expiración estará indicada en la parte posterior de la misma. En el caso de extranjeros residentes, la vigencia estará sujeta al tiempo que dure su permiso de residencia.
  • Costo: en España tanto el trámite como la emisión de la Tarjeta Sanitaria Europea son totalmente gratuitos. Sin embargo, cabe la posibilidad que en algunos destinos, al igual que sus ciudadanos, se deba asumir un porcentaje de los gastos incurridos por atención médica. Este monto no es reembolsable bajo ningún concepto.
  • Condiciones: cualquiera que se encuentre amparado bajo la seguridad social en España, puede solicitar una TSE tanto personal, como la de familiares a cargo. Asimismo, debe mantener las misma condiciones que la hicieron merecedor del documento durante toda su vigencia, de lo contrario podría suscitar una situación desfavorable, como por ejemplo, la responsabilización total de todos los gastos incurridos por atención médica.

Restricciones en cuanto al uso de la Tarjeta Sanitaria Europea

Así como facilidades, el uso de este documento también alberga una serie de restricciones. En un principio y como hemos mencionado, la TSE acredita la atención médica hospitalaria de carácter público, lo que quiere decir que que no es posible hacer uso de ella en centros o clínicas privadas.

Asimismo, la TSE carecerá de validez en caso de que el desplazamiento se realice con la finalidad de recibir algún tratamiento o procedimiento médico en el país destino.

Por otro lado, también habrá restricciones para los ciudadanos de países no miembros de la UE en calidad de residentes, quienes no podrán hacer uso de la TSE en los siguientes países: Dinamarca, Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza. Salvo que sean refugiados o estén cubiertos como miembros de la familia de un ciudadano de la UE.

También debes saber que la Tarjeta de Sanidad Europea tampoco será útil en caso de requerir un retorno de emergencia a causa de accidente, enfermedad grave o deceso. Para estos casos siempre será recomendable contar con otro tipo de seguro privado con cobertura asistencial internacional. 

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