Síntomas de la diabetes, podemos tenerlos y no lo sabemos. La diabetes afecta a más de 400 millones de personas en todo el mundo y un 14% la padecen los españoles. Según Diego Fernández endocrinólogo, indica los factores que deben ser vigilados para prevenir o diagnosticar esta enfermedad. Aquí te los daremos a conocer.
Muchas ganas de orinar
Su término científico es poliuria y es uno de los síntomas más comunes en la diabetes. Se origina debido a que la sangre tiene alto contenido de azúcar y el cuerpo busca la manera de eliminar el exceso. Es más visible durante las noches.
Sensación de sed en aumento
Esta es una alerta del cuerpo para compensar el exceso de líquidos perdidos en la orina. Según el especialista el metabolismo trata de disolver el azúcar con agua y entre más azúcar hay en la sangre más agua necesitaremos; como consecuencia de ello acudiremos al baño para eliminarla.
Pérdida de peso
Explica el Doctor Fernández que cuando el azúcar está muy elevado la insulina, que trabaja consumiendo energía, no es suficiente o no funciona como debiera. Con esta situación el cuerpo se ve obligado a buscar las reservas de grasa para obtener las energías que necesita.
Falta de energía entre los síntomas de la diabetes
La sensación de cansancio es un síntoma muy común en todos los tipos de diabetes en especial la tipo 2. Cuando el nivel de azúcar es excesivo la insulina no trabaja eficientemente el combustible interno que necesita el organismo y es cuando aparece el cansancio injustificado.
Las heridas tardan en cicatrizar
Según indica el especialista la diabetes es una enfermedad cardiovascular. Significa que los problemas más graves están relacionados con la vascularización. Pudiendo ser en los vasos grandes o en los vasos pequeños que son los que ayudan a cicatrizar las pequeñas heridas.
Hormigueo y picores en las extremidades
Se debe a las complicaciones en la vascularización y se llama neuropatías.
Visión borrosa
Los niveles altos de azúcar también afectar al sistema visual y sus conexiones. Cuando el cristalino se inflama por un exceso de azúcar; puede alterar nuestra capacidad de enfocar objetos y por lo tanto hacer que veamos borroso.
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