Puede originar graves consecuencias
Está catalogada como una condición compleja porque no obedece a ninguna regla y es fácil estancarse en ella. La dependencia emocional se origina por una carencia de autoestima y afecto. Esto hace que la persona le sea difícil ser consciente de sus acciones. Detrás de esta dependencia por lo general hay un miedo extremo. Cuando tu felicidad depende demasiado de una persona o cosa entonces puede haber consecuencias muy graves.
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Dependencia emocional. Los tipos más comunes
Para que entendamos mejor, vamos a conocer los tres tipos más comunes de dependencia emocional. Así que no caigas en ellas.
Dependencia emocional de la pareja. En ella la pareja asume que la pareja los protege de una terrible soledad. Esto hace que el otro se vuelva dependiente de su presencia. Es muy frecuente en personas con grandes inseguridades; no tienen claro de lo que son o no son capaces de hacer por sí mismo. Al final lo que causa es un gran sufrimiento. Este miedo es tan grande que puede desarrollar un comportamiento que desgastara la relación en lugar de fortalecerla.
Dependencia emocional a la familia. Es muy difícil de superar. Los hijos son educados con un miedo excesivo al mundo, percibiéndolo como amenaza y a sus padres como escudo protector. El que la padece espera constantemente la protección ofrecida por la familia. Cuando no la tienen se sienten incapaces de seguir. Puede traer graves consecuencia en el desarrollo de una persona a largo plazo.
Dependencia emocional al entorno social. Es la necesidad excesiva de ser reconocido y aprobado por los que nos rodean. Quien la padece es vital tener la apreciación y aceptación para poder seguir adelante. Para esto la persona hará lo que sea necesario para lograr esa aprobación psicológica aunque sea momentánea. Lo peor que les puede pasar es sentirse rechazados.
Se necesita un gran valor para aprender a superar esta sensación de dependencia emocional a ciertas cosas. Pero vale la penas que lo hagas para que sientas que retomas el control de tu vida.
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