Nuestros vínculos con los demás pueden tener efectos importantes en nuestra salud. De hecho, con la pareja, amigos, vecinos u otros las relaciones sociales pueden influir en nuestra biología y en nuestro bienestar.
Por lo que las investigaciones dan evidencia que tener lazos sociales fuertes se relaciona con una larga vida. Contrario esta la soledad y el aislamiento social relacionado con problemas de salud, depresión y riesgo de muerte prematura.
Las relaciones sociales de distintos tipos podrían ayudar a reducir el estrés y los riesgos de enfermedades del corazón. Estas conexiones nos permiten combatir con más facilidad los gérmenes y mejorar la actitud ante la vida.
Relaciones sociales: el matrimonio
Las parejas casadas tienden a vivir más y a tener mejor salud cardíaca que las parejas no casadas. Estudios demostraron que cuando un cónyuge quiere mejorar sus conductas relacionada a la salud el otro cónyuge hará lo mismo. Por el contrario si el matrimonio está lleno de conflicto los beneficios para la salud podrían reducirse.
Las formas en que se comportan las parejas durante un conflicto pueden afectarlos negativamente. Incluso influye en la cicatrización de las heridas y los niveles de las hormonas del estrés en la sangre.
Este estudio fue financiado por NIH y realizado por Kiecolt-Glaser y sus colegas.
Las parejas con el doble problema de matrimonio hostiles y depresión podrían correr el riesgo de tener problemas de peso.
Los conflictos a largo plazo con otras personas son una fuente de estrés importante que puede afectar la salud. Los efectos se mitigan al percibir que se cuenta con apoyo social dice el Dr. Sheldon Cohen. Es importante resaltar que el Dr Cohen es psicólogo de la Universidad Carnegie Mellon, en Pittsburgh. Desde hace 3 años viene explorando los vínculos entre las relaciones y la salud.
En este sentido, cuanto más diverso eran las relaciones sociales menos probabilidades había de desarrollar un resfriado al estar expuesto al virus.
Los abrazos parecerían proteger del estrés. Las personas que abrazaban con frecuencia también tenían menos riesgo de sufrir un resfriado según el Dr Cohen.