La cara desconocida de la salud urológica: cómo prevenir y tratar las infecciones de transmisión sexual

Dr. Andrés Madero Frech Urólogo especialista
El compromiso con la salud íntima comienza con una atención cercana y basada en evidencia. Imagen cedida para uso referencial.

Por Dr. Andrés Madero Frech 

Cuando pensamos en la urología, solemos imaginar enfermedades de la próstata, cálculos renales o cirugías mínimamente invasivas. Sin embargo, existe un aspecto igual de importante y muchas veces ignorado: la salud sexual. Las infecciones de transmisión sexual, especificamente (ITS), no distinguen género, ni condición social, y su impacto va mucho más allá de la vida íntima: pueden afectar la fertilidad, la salud general y la calidad de vida. 

Lo que todo paciente debe saber sobre las infecciones de trasmisión sexual

Las ITS más comunes que atendemos en consulta son la clamidia, la gonorrea, el virus del papiloma humano (VPH), el herpes genital y la sífilis. Cada una se manifiesta de forma diferente, pero todas comparten un mismo riesgo: la facilidad con la que pueden transmitirse si no se toman medidas de prevención. Además de no ser identificadas y tratadas, con seguridad van a causar un daño en la salud de cualquier persona. 

Síntomas que no debes ignorar 

  • Ardor o dolor al orinar
  • Secreción uretral anormal
  • Lesiones, verrugas o úlceras en los genitales
  • Dolor en la relación sexual
  • Inflamación testicular. 

Hasta en un 60% la infección puede estar presente sin síntomas. Por ello, recomiendo chequeos periódicos, incluso en ausencia de molestias. Es por esto que, para nosotros, es importante siempre considerar que estas pueden estar presentes en ciertos grupos de edad o ante ciertas situaciones circunstanciales para cada persona. 

Recomendaciones prácticas 

  1. Protección siempre: el uso correcto del preservativo sigue siendo la herramienta más eficaz
  2. Habla con tu pareja: la comunicación clara evita riesgos y genera confianza
  3. Vacúnate: la vacuna contra el VPH salva vidas y previene cánceres asociados
  4. Acude a revisión urológica: especialmente si tienes una vida sexual activa con más de una pareja o ante lo que se considera práctica sexual de riesgo.
  5. Evita la automedicación: cada infección requiere estudios y tratamiento específico. 

La opinión del especialista 

En mi experiencia, lo que más retrasa la atención es la vergüenza y la minimización de síntomas. Los pacientes suelen llegar después de meses de síntomas o, peor aún, después de complicaciones. La realidad es que consultar a tiempo es siempre la mejor decisión: nos permite ofrecer tratamientos más efectivos, proteger la salud de la pareja y evitar secuelas a largo plazo. 

Reflexión final 

La urología sexual no debe ser un tema tabú, sino una parte natural de la salud integral. Informarte, cuidarte y consultar son acciones simples que protegen tu bienestar. Mi invitación es clara: haz de tu salud íntima una prioridad, porque es sinónimo de calidad de vida


Dr. Andrés Madero Frech

Sobre el autor

Dr. Andrés Madero Frech

Urólogo especialista en cirugía mínimamente invasiva.
Formación en el Tecnológico de Monterrey y especialidad en Urología por la UANL.
Enfoque en salud sexual, prevención de ITS y procedimientos de precisión.

El compromiso con la salud íntima comienza con una atención cercana y basada en evidencia. Imagen cedida para uso referencial.