El temblor de un ojo es una sensación que hemos sentido alguna vez, o quizás más de una vez; es un poco incomoda y molesta. Se trata de espasmos o contracciones que se dan de forma involuntaria y generalmente son transitorias, en las fibras musculares que rodean el ojo.
En un primer momento es algo que no debe preocuparnos, porque; así como repentinamente tiembla, también deja de hacerlo; no hay una razón especifica que genere estos espasmos en el ojo. Sin embargo; si existen factores que pudieran ser los causantes que desencadenan tan molesta sensación.
Si utilizamos términos más científicos, estas contracciones son fasciculaciones del parpado o blefaroespasmos; que no son más que descargas nerviosas espontáneas en grupos de fibras musculares esqueléticas. Entre algunos de los factores que podrían generar este temblar de los ojos, podemos mencionar el estrés, el nerviosismo; y aunque no es habitual también podría estar relacionado a enfermedades más complejas.
En momentos de estrés, ansiedad, nerviosismo que pueda estar afectándonos, tenemos los nervios a flor de piel y con ello las fibras musculares suelen estar más sensibles. Una vez pasado estos episodios de angustia, los temblores oculares deberían desaparecer.
Temblor del ojo constante
Si estos temblores, no desaparecen en máximo una semana, si observas que estas contracciones cierran el parpado completo, si afecta alguna otra zona del rostro, si hay hinchazón; debes preocuparte, son luces de alarma y sería recomendable acudir al médico; ya que podría tratarse de una enfermedad o trastorno del sistema nervioso o del cerebro, para descartar Parkinson, síndrome de Tourette u otra patología.
Debemos recordar que nuestro cuerpo es un canal de información, sabio por naturaleza, cuando algo no está bien en nosotros, inmediatamente el organismo nos envía señales de alerta, es importante escucharlo y descifrar sus mensajes. Vivir la vida con menos angustias, nos garantiza una vida saludable.
