Llevar una rutina libre de estrés no es tarea sencilla. No obstante, el primer factor contribuyente a la mejora de esto es el buen humor. Lo mencionado tiene efectos en muchos sentidos. Estos abarcan desde la actitud y disposición al trabajo, hasta la personalidad del individuo. Además, influye en la relaciones con el entorno.
Por tanto, se considera esencial implementar estrategias que den paso al buen humor. De esta forma se obtendrá un nivel optimo de relajación. Del mismo modo, abre paso al disfrute de las acciones y posibilidades que el día pueda ofrecer a lo largo de su desarrollo.
PASOS PARA MANTENER EL BUEN HUMOR
Primero que todo, no pierdas tiempo en la cama. Está comprobado que posponer la alarma reduce tus niveles de concentración y tolerancia. Por tanto, estarás malhumorado el resto del día solo por abarcar cinco minutos mas de sueño que no aportan nada positivo.
Acto seguido, bebe un vaso de agua. Muchas veces la fatiga y el ligero dolor de cabeza por las mañanas surge de la deshidratación. En este sentido, el cuerpo necesita liquido después de ocho horas de sueño.
Más tarde, al empezar las actividades, hazlo con algo de interés para ti. Nada mejor que darle inicio a un día de trabajo con algo que disfrutes hacer. Lo mencionado ayudará a relajar las actividades que vendrán en lo sucesivo.
Asimismo, el desayuno es la comida más importante del día. Para nadie es agradable desarrollar las actividades pendientes en la mañana con el estomago vacío. La falta de alimentación es clave para el mal humor. Por ello procura desayunar de forma saludable.
Finalmente, toma tu tiempo. No vayas deprisa y organízate. Ir deprisa aumenta el estrés y la eficacia con la cual se realizan las actividades.
Teniendo todo esto en cuentas disfrutarás de tus días con una sonrisa en el rostro en todo momento.
