Es importante conocer acerca de la anasarca, ya que es cuando se hincha de manera general de todo el cuerpo. Esto puede suceder cuando los tejidos del organismo retienen excesivo líquido. Este estado igualmente es conocido como edema generalizado extremo.
Es necesario tener claro que la anasarca no es una enfermedad en sí; por el contrario, es una señal o consecuencia de una condición médica.
Habitualmente si aparece la anasarca, está indicando un deterioro o enfermedad grave en algún órgano. Es distinta al característico edema. Todos en algún momento experimentamos una hinchazón; lo que podría tratarse a una diversidad de causas, como un golpe, deshidratación o una secuela secundaria mínima de la medicación.
Generalmente, la hinchazón o el edema solo afectan una zona concreta del cuerpo, como los pies, las manos o las piernas. Sin embargo, en la anasarca, la hinchazón perturba a todo el cuerpo y es considerada severa. En ocasiones, es tan grave que problematiza inclusive el movimiento.
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Causas de la anasarca
Administración de líquidos intravenosos: Si el organismo no logra adaptarse a los fluidos administrados, puede acarrear un edema severo.
Enfermedades renales: cuando el sistema renal está sobresaltado, el líquido no logra eliminarse apropiadamente del organismo, lo que consigue originar anasarca.
Cirrosis: puede sobrevenir dada la insuficiencia hepática. El padecimiento hepático logra producir cambios en las hormonas que perturban la regulación de líquidos en el cuerpo. Cuando el hígado no trabaja de forma eficiente como debe, logra causar que el líquido se filtre a los tejidos.
Desnutrición: la insuficiencia proteínica en la dieta logra que el líquido se almacene en los tejidos. En casos intensos, conduce a anasarca.
Mal trabajo del corazón: cuando el músculo del corazón no trabaja adecuadamente, afecta la eficiencia del corazón para bombear sangre por todo el organismo. Si el corazón no bombea de forma eficaz, logra originar acumulación de líquido en los tejidos.
Esta hinchazón en el cuerpo consigue inducir a sintomatologías adicionales, como:
Problemas para caminar o mover los brazos.
Acrecentamiento de los latidos cardíacos.
Coyunturas adoloridas.
Dificultades para respirar.
La anasarca asimismo consigue ser una complicación letal en el caso de que se almacene líquido en los pulmones. El líquido en los pulmones denominado edema pulmonar, sus señales envuelven dolor en el pecho, problemas para respirar y tos.
