El caminar diario
Caminar con frecuencia nos puede dar muchos beneficios desde el punto de vista cardiovascular. Si lo podemos realizar unas tres veces a la semana con un promedio mínimo de tiempo de unos 30 minutos y con una velocidad razonable, mejorará significativamente el rendimiento de nuestro corazón.
El caminar es un deporte recomendado para cualquier edad desde niños hasta ancianos. Incluso lo puede realizar personas que hayan sufrido alguna lesión y aquellos sedentarios que deseen iniciarse en un plan de ejercicios. Caminar regularmente proporciona flexibilidad y tonifica los ligamentos, músculos y tendones. Estos que tienden a endurecerse en el transcurrir de los años. Con mayor flexibilidad puede aliviarnos problemas de espalda y de articulaciones así como también nos previene de futuras lesiones. Otro beneficio añadido es en nuestro metabolismo porque nos permitirá elevar nuestra capacidad de producir energía. Por lo general elimina el exceso de peso que tanto aborrecemos.
Ayuda a combatir enfermedades
Caminando en cualquier época del año aumentará nuestra inmunidad ante gripes y resfriados. Esto beneficiará nuestra capacidad natural de reacción. Es la forma más eficiente de eliminar el estrés y otros síntomas que la acompañan como la ansiedad, la tensión, el nerviosismo, el insomnio, etc. Seremos personas con más seguridad en nosotros mismos, más equilibrados, permitiéndonos tener mayor capacidad para solucionar nuestros problemas y controlar situaciones de estrés. Seremos más sociables y podremos descubrir nuevos valores en nuestras vidas.
Físicamente nos favorecerá en lo estético porque al caminar nos reafirma las piernas, combate la celulitis y consumimos muchas calorías. Si lo hacemos en forma moderada podemos consumir alrededor de 500 calorías por hora pero si lo hacemos a paso rápido duplicamos su consumo.
No es necesario ningún tipo de aprendizaje para comenzar a caminar pero para que tengas un buen efecto cardiovascular es necesario llevar un buen paso sin olvidar previamente un tiempo de calentamiento con movimientos respiratorios.
