La inactividad ocasiona en nuestro organismo una serie de posibles desencadenantes que pueden relacionarse directamente con la falta de ejercicios. El cuerpo manifiesta en silencio una gran cantidad de necesidades del individuo ¿Y cómo lo hace? A través de determinados síntomas.
Según la licenciada en preparación física y alto rendimiento Claudia Lescano hay señales visibles. Algunas de estas señales serían: la obesidad o la falta de masa muscular y en menor grado descoordinación en desplazamiento o la torpeza de movimientos. Por otro lado existen síntomas que se deben detectar por medio de estudios clínicos como: la osteopenia u osteoporosis, la hipertensión arterial o el colesterol alto.
Existen otros síntomas que provienen del mal manejo de la energía proveniente de los alimentos como: el insomnio, la falta de apetito y la depresión. Estos se manifiestan como consecuencia de la poca movilización de la energía de nuestro cuerpo.
Conozcamos esas series de signos que exigen a la persona que debe ponerse en movimiento a través del experto en acondicionamiento físico Brandon Mentore.
Inactividad. Prestemos atención a las señales de nuestro cuerpo
- Se enferma con mucha frecuencia que lo normal. Para evitarlo lo mejor es el ejercicio regular.
- Falta de ganas y depresión. En este sentido, unos de los beneficios del ejercicio es que aumenta la dopamina, la beta-endorfina y el Factor Neurotrófico Derivado del Cerebro (BDNF). Como consecuencia mejora el estado de ánimo, la memoria y la productividad.
- Falta de aliento con movimientos normales. Esto es señal clara de un sistema cardiovascular con poco acondicionamiento, así lo explicó el especialista.
- Realizar ejercicios permite un descanso reparador y ayuda a regular el ritmo circadiano. Pero además, sintoniza y controla los ciclos del sueño.
- Estreñimiento. Con la ejercitación se estimula el funcionamiento intestinal. Cuando se entrena la comida tarda menos tiempo para atravesar el intestino grueso . De esta manera, disminuye la cantidad de agua que el cuerpo absorbe de la materia fecal.