La vida social después de ser madre.

Antes de ser padres, seguramente la vida social de una mujer es bastante amplia. Ir de compras, a la peluquería, a cenar con amigos, fiestas, reuniones. Pero con la llegada de un hijo todo cambia, y esa vida social también.

Principalmente no es parte de las prioridades, luego por que tampoco quedan muchas energías para ello. Sin embargo cuando ya todo vuelve a la calma, y se han establecido rutinas con el nuevo miembro de la familia, la vida social puede hacer falta.

Los padres quizás sientan algo de nostalgia por que ya su circulo de amigos no le toman tanto en cuenta, o por ver como ese circulo de amigos de antes siguen reuniéndose y ellos no.

Sin embargo, no por ser padre se debe olvidar que hay una vida más allá de las paredes de la casa. Aunque no pueda ser como antes si puede haber un sano balance.

Aunque las interacciones sociales cambian después de la llegada de un bebe, se disfruta otra etapa que es conocer a ese bebe y dedicarle todo el amor y el tiempo que necesitan.

Etapas para que la madre retome la vida social.

Aislamiento temporal.

Se recomienda que los primeros dos meses del bebe no se exponga a rebullicios y lugares concurridos. Esto por que el sistema inmunológico del pequeño aun es muy frágil y susceptible a cualquier infección. Así que en esta primera etapa debido a los cuidados que requiere el recién nacido y el cansancio que esto genera los padres mismos se aíslan temporalmente de la vida social.

Sin embargo se pueden evitar caer en extremos. Que te aísles no significa cortar toda comunicación, siempre puede existir el contacto por teléfono o redes sociales. Pasado los primeros dos meses puedes hacer pequeñas reuniones en casa.

Bebé a bordo.

Cuando se empieza a establecer rutinas ya con el bebe, la lactancia este bien plantada, el niño un poco mas grandecito los padres poco a poco pueden ir retomando su vida social.

El tipo de actividades sociales y recreativas, la intensidad, los lugares y los horarios en que se desarrollen dependerán de la edad del niño, su carácter y los apoyos que los padres reciban de familiares y amigos.

Pasado los primeros tres meses del bebe, lo recomendable es involucrar al pequeño en los encuentros sociales, ya sean reuniones familiares o entre amigos. Solo debes tener en cuenta que el lugar y los horarios no sean contraproducentes para el pequeño.

Esta inclusión a la vida social trae también beneficios para el bebé pues le genera vínculos estables duraderos con sus papás, desarrollo de patrones de seguridad y socialización en contextos distintos al del hogar y estimulación ante nuevas sensaciones, sonidos y personas.

También hay que dejarlo en casa.

Los padres no deben sentirse culpable de disfrutas de espacios de entretenimiento sin sus hijos. Busca apoyo de abuelos, familiares o una niñera de confianza que cuide al niño por algunas horas.

Pero ambos padres no siempre tienen que salir juntos porque también es cierto que cada uno tiene sus propios intereses, merece un espacio individual y tiene sus propias redes de amigos.

Así que una buena idea, es acordar quien sale un día y quien se queda en casa cuidando del bebe.

Buscar a otros padres.

Una buena estrategia al retomar la vida social es contactar con otros padres con hijos de la misma edad. De esta manera habrá mas solidaridad , apoyo y entendimiento.

Finalmente podemos destacar que lo importante es no caer en un aislamiento. Así como tampoco pensar que tendrás una vida social exactamente igual a la de antes de nacer el bebe. Ya que un bebe implica cambios que valen la pena. Todo en justa medida y equilibrio no hace daño.