¿Alguna vez te has planteado la idea de tatuarte? ¿De tener la mayor cantidad de tatuajes posibles? Pues cuidado, si tienes como prioridad la práctica de deportes y se somete a rutinas de resistencia. No le eche la culpa a la ola de calor, o al cambio climático; hay algo que esconden los tatuajes en contacto con las altas temperaturas, y nosotros se lo explicaremos.
No crea tampoco que su desmedido afán por comer sal le provoque una alza en los niveles de sodio. La causa menos ilógica y pensada está en toda tinta bajo la piel que altera el sistema natural de refrigeración el nuestro organismo: teniendo como resultado sudar menos, y también perderá menor cantidad de sodio; lo cual es indispensable para el intercambio celular del organismo.
La tinta bloquea la pérdida de sodio: la práctica deportiva no debería mezclarse con los tatuajes
Aún es poco creíble; pero esta fue la conclusión a la que llegó el departamento de Fisiología de la escuela universitaria Alma College, en Michigan (EE UU). El punto de partida de la investigación; dirigida por el profesor Maurie Luetkemeier es el auge de los tatuajes entre deportistas y ciudadanos pertenecientes a la marina de ese país.
Dejando a un lado el ámbito investigativo; no hace falta mucho para corroborar el por qué el aumento de los tatuajes entre deportistas. Resulta un aspecto íconico y hasta cierto punto simbólico; como es el caso de algunos asiduos a la práctica de deporte; como es el caso de deportistas de renombre, que calzan perfecto en este molde.
Los pigmentos disminuyen la sudoración
Finalmente, Luetkeimeier se plantea que si los depósitos de pigmentos permanente son localizados en profundidad similar a la de las glándulas sudoríparas, interfieren considerablemente en la capacidad de sudoración. Pero no todo quedó allí; el profesor necesitó la colaboración de 10 personas, de mediana edad, tatuados en distintas partes del cuerpo. Por lo que todos los análisis ahondaron en lo mismo: la capacidad de sudar es disminuida porque los pigmentos bloquean el proceso de expedición de sodio del organismo.
