Puro Nervio, tener un hijo hiperactivo

Niños puro nervio, los niños, por lo general, son muy traviesos, inquietos y revoltosos
Niños puro nervio, los niños, por lo general, son muy traviesos, inquietos y revoltosos

Niños puro nervio, los niños, por lo general, son muy traviesos, inquietos y revoltosos. Muchas veces logran sacarnos de nuestras casillas, pero esto es algo normal. Lo preocupante viene cuando no paran nunca de moverse, van de un lado a otro, son impulsivos y no pueden centrar su atención en un objeto o acción durante mucho tiempo.

Entonces hay que estar alerta, ya que nos podemos encontrar ante un niño con trastorno de hiperactividad y falta de atención. En el desarrollo normal del niño es común que, por ejemplo, a los dos años casi nunca esté quieto y que a los cuatro años sea muy activo y ruidoso.

Esta manera de actuar varía de un niño a otro, incluso algunos pequeños tienen un período de atención más corto y lento de lo que se considera habitual para su edad. Otros son excesivamente activos y dinámicos, lo que, sin tratarse de un problema, provoca con frecuencia conflictos entre padres e hijos, ya que estos niños tan inquietos logran acabar con la paciencia de quienes les rodean.

Puro nervio, Cuándo existe un problema

La alarma de la hiperactividad salta cuando el exceso de actividad y de excitación en el niño es tan alto que afecta a los padres y cuidadores. Según algunos expertos, este trastorno se percibe en función de la tolerancia y aguante que tengan las personas afectadas; es decir, los padres y educares.

Puro nervio, Cuándo existe un problema
Puro nervio, Cuándo existe un problema

Desde que nacen, los niños con este síndrome de Déficit de Atención con Hiperactividad son literalmente un manojo de nervios, tienen gran dinamismo y, a medida que crecen son cada vez más impulsivos, exigentes, imprudentes y no toleran la frustración.

No tienen en cuenta las normas sociales y actúan sin reflexionar con el fin de alcanzar sus deseos de inmediato. A su gran temperamento, que en algunos casos esconde una gran timidez, se suma una personalidad desorganizada y un tipo de conducta en la que destaca la falta de atención en aquello que realizan.

Algunos consejos útiles

Si tu hijo es hiperactivo, las siguientes pautas te pueden servir de ayuda para mejorar algunos aspectos:

Estos niños deben hacer mucho ejercicio al aire libre, siendo preferible que lo realicen con un profesor.

No hay que castigarles en el colegio sin recreo, precisamente porque ellos necesitan mucho movimiento.

Restringir el consumo de dulces, y alimentos con gran contenido de conservantes y colorantes, como los embutidos. Algunos expertos recomiendan eliminar por completo el chocolate y potenciar, en cambio, la dieta mediterránea (legumbres, frutas, pescados y carne), que es la más adecuada para estos niños.

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