La combinación de alimentos forma parte importante de numerosas dietas. Con el bebe intentamos no mezclar sus alimentos innecesariamente ofreciéndole comida en un único plato. De esta manera se evita sobrecargar su sistema digestivo que todavía está en entrenamiento. En cuanto a los adultos muchos tienen problemas digestivos y experimentan mejoría cuando evitan mezclar ciertos alimentos.
Combinación de alimentos ¿es necesario que las personas sigan esas pautas?
La combinación de alimentos es un arte milenario desarrollado por siglos en nuestra cultura culinaria. En el naturismo esta combinación a veces tiene base razonable y otros no tanto. La complicación está en la discrepancia de unos autores y otros.
Mezcla de alimentos idónea
Cuando las digestiones son lentas, incompletas o pesadas pueden alterar los nutrientes absorbidos. Según el investigador norteamericano Herber M. Shelton quien es pionero en este campo; cada tipo de alimento origina que el organismo segregue determinadas enzimas digestivas.
Al consumir alimentos que excitan o estimulan secreciones de enzimas contrarias estaremos disminuyendo la eficacia del proceso digestivo. Esto ocasiona un mayor riesgo de fermentación y putrefacción de los alimentos dentro del organismo. A la larga lo que puede provocar es una autointoxicación corporal.
Todo lo que comemos va formando la estructura y la cantidad de nuestra flora intestinal facilitando la digestión de los alimentos habituales en la dieta. De hecho, es probado que los que han sido vegetarianos durante mucho tiempo pueden desarrollar cierta intolerancia física a la carne o al pescado provocándole algún tipo de dolencia intestinal.
No todas las personas tienen el mismo ritmo y fortaleza digestivos. Si no sufrimos de complicaciones gástricas no es necesario vigilar excesivamente el tema de la incompatibilidad de alimentos. Debemos tener en cuenta que el principal médico somos nosotros mismos y eso comienza escuchando nuestro propio cuerpo. Si nuestro estómago o intestino protestan de algún modo debemos hacer cambios en nuestros hábitos alimentarios. Cuando no es así, nada nos molesta, posiblemente estamos en buen camino.
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