Baño de bosque, es una expresión japonesa traducida que concretamente, representa “absorber la atmósfera del bosque”; y es empleado para hacer referencia a las caminatas por zonas verdes en las que la tranquilidad entra al cuerpo y la mente del viajero.
En los que el aire mima con delicadeza la piel, los sonidos y fragancias del ambiente alcanzan a extasiar. Y cuando la persona se marcha del lugar, lo hace con una sensación de armonía interior superior que con la que entró. Estudios confirman que esta experiencia es más favorable de lo que ya se creía. La mayor exhibición a espacios naturales conlleva un progreso significativo en la salud general.
Investigadores de la Universidad de Anglia del Este, han concluido; que residir cerca de espacios naturales y pasar tiempo al aire libre mejora significativamente la salud. La estancia en zonas verdes minimiza el peligro de padecer diabetes tipo 2; dificultades cardíacas, muerte precoz, parto prematuro, estrés o presión arterial alta.
El estudio reunió información integral de más de 290 millones de personas. Y las conclusiones registran que la población con niveles de exposición a zonas verdes más altos es más proclive a gozar de una buena salud general. Esta información se recopilo en cerca de 20 países donde se incluyen Reino Unido, Estados Unidos, España, Francia, Australia y Japón; donde la experiencia del baño de bosque ya es abundante entre su población.
Los beneficios del baño de bosque en nuestra salud
Las zonas verdes se establecieron como espacios abiertos y sin edificar con vegetación natural; así como zonas verdes urbanas donde se incluyen parques y en las calles de las ciudades. Los investigadores compararon la salud de las personas con insuficiente acceso a las zonas verdes y aquellas con una mayor exposición.
En Reino Unido, 11.7 millones de días laborales se desaprovechan cada año por dificultades de estrés, depresión o ansiedad. Uno de los hallazgos más reveladores es que la exposición a zonas verdes minimiza los niveles de cortisol salival, un marcador fisiológico del estrés.
El propósito es que la investigación promueva en las personas salir más seguido; y originar la creación, regeneración y subsistencia de las zonas verdes en zonas selectas y colectividades desfavorecidas.
Pasar mayor tiempo en zonas verdes minimiza el peligro de sufrir dificultades cardíacas, depresión, angustia o estrés.
Los expertos relacionan una mejor salud y tiempo en zonas verdes con el mayor número de elecciones para ejecutar acciones físicas y socializar. Igualmente se puede relacionar con la exposición a bacterias y fitoncidas; compuestos orgánicos con propiedades antibacterianas que liberan los árboles.
Los baños de bosque son una terapia extensa en Japón, bien sea relajándose acostados en el bosque o paseando por él.
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