La mayoría de nosotros tenemos control sobre la vejiga
Tenemos un cuerpo muy sabio. En la pared de la vejiga se encuentran unos pequeños receptores que “avisan” a nuestro cerebro cuando está al límite. Aunque por fortuna la mayoría de nosotros tenemos control total sobre la función de la vejiga. Esto significa que cuando recibimos el mensaje podemos decidir si vamos al baño o aguantamos ir a orinar. Pero cuando retenemos la orina ¿Qué sucede en nuestro cuerpo?
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No existen reglas estrictas sobre cómo y cuándo es seguro contener la orina. Aunque algunas personas pueden ser más propensa a los efectos secundarios que otras.
Cuando retenemos la orina. Posibles efectos secundarios
- Dolor en la vejiga. Las personas que por lo general ignoran la necesidad de orinar pueden sentir dolor en la vejiga o los riñones. También puede provocar calambres pélvicos.
- Infecciones del tracto urinario. A veces al mantener la orina por mucho tiempo puede hacer que las bacterias se multipliquen. Eso podía ocasionar una infección en el tracto urinario.
- Estiramiento en la vejiga. Esto puede dificultar que este órgano se contraiga y libere la orina con normalidad. Es posible que sea necesario medidas adicionales como un catéter.
- Daños a los músculos del suelo pélvico. El retener con frecuencia la orina podría dañar el musculo esfínter uretral. Esta mantiene la uretra cerrada evitando que la orina se escape si ocurre, podría ocasionar incontinencia urinaria. Es recomendable realizar ejercicios de
- Piedras en el riñón. Podría hacer que se formen cálculos renales en las personas con alto contenido mineral en la orina.
¿Es posible que la vejiga estalle?
Esto es extremadamente raro que suceda pero al límite de estallar. Lo que si puede suceder es que los músculos que retienen la orina no respondan ocasionando que la persona se orine accidentalmente. Puede ser un momento extremadamente doloroso.
El retener la orina no tiene que causar daño, sin embargo, hacerlo puede causar riesgo de infección y otras complicaciones.
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