En el preoperatorio cierto nivel de ansiedad es normal
Momentos previos a una cirugía suelen aparecer muchas preocupaciones que hacen surgir varias respuestas emocionales haciendo más difícil la recuperación. En pocas palabras, el estrés preoperatorio puede atrasar la recuperación.
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Y es que la cirugía puede representar un alivio pero a su vez puede ser una fuente de estrés psicológico. Durante el periodo preoperatorio es normal cierto nivel de ansiedad y hasta deseable. Esa capacidad de pensar y de razonar es la que nos diferencia del reino animal.
Estudios indican que al preparar a la persona psicológicamente para una intervención quirúrgica se logra:
- Disminuir la ansiedad.
- Una estadía hospitalaria menor.
- Que el dolor se soporte mejor y por lo tanto menor necesidad de analgésicos.
- Un posoperatorio más corto.
- Que el paciente siente más bienestar y control de la situación.
Por el contrario una gran ansiedad o entres pueden afectar:
- El efecto de las drogas anestésicas.
- La tensión arterial o la frecuencia cardíaca.
- Que la cicatrización de las heridas demore más.
- Al sistema inmunológico que puede debilitarse y por lo tanto un posoperatorio más largo.
También puede presentarse otros problemas como: insomnio, irritabilidad, problemas con el médico y la enfermera y el uso excesivo de analgésicos.
Es importante que el paciente antes de ser intervenido quirúrgicamente tenga una especial atención a nivel médico y psicológico. Es necesario que el paciente confié en su médico y a su vez que el profesional: escuche al paciente, le dé información y se haga eco de todas sus preocupaciones.
El estrés preoperatorio: un doctor que inspire confianza y seguridad
Según la Asociación Argentina de Cirugía si la persona no confía en el doctor es mejor buscar otro profesional. Aunque tenga las mejores referencia es preferible uno que le inspire seguridad y confianza.
Para concluir, lo más importante es tener una comunicación estrecha entre el paciente y todo el equipo de salud.
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