La lasaña es un plato que tiene miles de fanáticos en todos los rincones del mundo, gracias a su combinación de sabores resulta ideal tanto para las comidas como para la cena. En algunos casos puede que parezca un tanto pesado; pero una de las ventajas de esta preparación es que tiene múltiples variedades, como en este caso.
Al decir lasaña ligera puede sonar un poco contradictorio pero en realidad sí existe y vaya que es deliciosa. Ya sea para los que quieren mantenerse en forma pero sin privarse de deliciosas preparaciones o para aquellos que el plato tradicional les puede caer un poco pesado al estomago.
Aprender a preparar lasaña con un receta sencilla
A la hora de querer preparar lasaña inmediatamente vienen a la mente algunas ideas de que esta receta puede ser complicada o con muchos ingredientes; sin embargo en este caso es sumamente sencilla que incluso quienes no tengan mucha práctica en la cocina resultarán todos unos expertos.
Ingredientes
- Una caja de lasaña
- 200 gramos de achicoria
- 100 gramos de queso parmesano rallado
- 100 gramos de jamón
- Una lata de pasta de tomate
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
Lo primero que se debe hacer es poner a cocinar la pasta de la lasaña en una olla con sal durante unos minutos. Simultáneamente se debe lavar y cortar en trozos pequeños la achicoria.
Luego se debe engrasar una bandeja o fuente para el horno y agregar una mínima cantidad del agua en la que se cocino la pasta para empezar a darle forma a la lasaña.
Se agrega una capa de pasta para continuar con la pasta de tomate y luego la achicoria; seguido de una loncha de jamón y así sucesivamente hasta llegar al final. El último toque es agregar el queso rallado y un toque de pimienta. Debe cocinarse durante 15 minutos a 280° C.
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