¿Cómo conservar, congelar y descongelar la leche materna? Guía para mamás primerizas

Leche materna
Leche materna

La leche materna extraída es el mejor alimento que puede tomar tu bebé cuando no estás con él. Así que ¿cómo puedes guardar y usar tu leche de forma segura? aqui te explicamos.

La vuelta al trabajo no tiene por qué implicar el fin de la lactancia materna. Prolongar la lactancia es posible gracias a la extracción y la conservación de la leche para que el bebé pueda beneficiarse de ella aunque la madre no esté con él.

 La leche extraída conserva la mayoría de sus beneficios para la salud, por lo que si te tienes que perder una toma, será mucho mejor para tu bebé que cualquier leche de fórmula.

No obstante, una higiene adecuada es fundamental para garantizar la seguridad de la leche almacenada para tu bebé. Sigue leyendo para saber cómo almacenar la leche materna de forma adecuada.


¿Cuál es el mejor método para almacenar la leche materna?

La leche materna es mejor para tu bebé que la leche de fórmula. Del mismo modo, la leche materna recién extraída es preferible a la refrigerada, y la refrigerada es mejor que la congelada.

Esto es así porque la leche recién extraída ofrece las mejores propiedades antibacterianas y cuenta con niveles superiores de antioxidantes, vitaminas y grasa que le leche refrigerada o congelada.


Extracción

Antes de comenzar la extracción es fundamental que la madre se lave muy bien las manos y los utensilios que vayan a usarse tanto para la extracción (sacaleches) como para el almacenaje de la leche. El proceso puede hacerse de forma manual o usando un sacaleches.


Almacenar la leche


Es necesario usar envases aptos para uso alimentario, de vidrio o plástico duro. Siempre con tapa, o bolsas especiales para almacenar leche materna que pueden conseguirse en la farmacia o en tiendas de puericultura. Se recomienda guardar alrededor de 100 ml y colocar la fecha en cada envase.

Almacena la leche en la parte más fría del frigorífico: en la parte posterior, en el estante situado encima del compartimento de las verduras. No la almacenes en la puerta del frigorífico, donde la temperatura es menos consistente.

Leche materna
Leche materna


Congelar la leche materna

El tiempo que puede conservarse la leche materna dependerá de la temperatura que alcance el refrigerador o congelador. La leche humana puede conservarse durante algunos días en la nevera y hasta varios meses en el congelador.

Puede permanecer a 15º, 24 horas, entre 19º-22º, 19 horas y a 25º de 4 a 8 horas. Refrigerada entre 0º y 4º, puede permanecer de 5 a 8 días.

Por su parte, en el congelador, si este está dentro de la nevera, 2 semanas, en uno separado (tipo combi) 3-4 meses, mientras que en un congelador separado, tipo comercial con temperatura constante de -19º, 6 meses o más.

Sigue leyendo para saber cómo congelar la leche materna de forma segura:

  • Congela la leche materna lo antes posible tras su extracción.
  • Se puede añadir leche extraída a la leche materna ya congelada, siempre que la leche que desees añadir se haya enfriado previamente en el frigorífico. No añadas leche a temperatura corporal a leche que ya esté congelada.
  • Para facilitar la descongelación y minimizar las pérdidas, guarda la leche en porciones pequeñas (menos de 60 ml). Estas raciones se pueden combinar después de descongelarlas.
  • Comprueba que tus recipientes de almacenamiento de leche materna se puedan usar en el congelador. Algunos productos (como los biberones de cristal) pueden romperse a temperaturas muy bajas. Las bolsas de almacenamiento de leche materna de Medela son ideales para almacenar la leche materna congelada, ya que son aptas para congelador, están listas para su uso y son fáciles de etiquetar.
  • No llenes los biberones ni las bolsas más de tres cuartos de su capacidad, ya que la leche materna se expande al congelarse.
  • Almacena la leche congelada en la parte posterior del congelador, donde la temperatura es más constante. Mantenla alejada de las paredes de los congeladores con función de autodescongelación.


Descongelar la leche


Los bebés sanos nacidos a término pueden beber la leche materna a temperatura ambiente o calentada a la temperatura corporal. Algunos bebés prefieren una de estas dos opciones, mientras que a otros les es indiferente.

El mejor método para descongelarla es colocar el recipiente bajo el chorro de agua fría e ir dejando que el agua salga progresivamente mas caliente hasta lograr descongelar la leche y que ésta alcance la temperatura ambiente.

No se debe descongelar la leche materna en el microondas ni hacerla hervir, basta con llevarla a temperatura ambiente, tibia, que es como sale de nuestro cuerpo.

Como no es posible saber qué cantidad va a tomar el bebé lo más conveniente dejar la leche descongelada en un recipiente madre y ofrecer al bebé pequeñas cantidades en otro recipiente (vaso, cuchara, jeringa, biberón).

Así se va rellenando del recipiente que se ha descongelado. Siempre que no haya estado en contacto con la saliva del bebé, la leche descongelada puede mantenerse refrigerada durante 24 horas.

Si la leche ha sido congelada y descongelada, se puede refrigerar hasta 24 horas para usarse después, pero nunca debe volver a congelarse.

Con información de www.medela.es