Es importante la prevención con el uso de nuestros cosméticos. Renovarlos con cierta constancia es fundamental para así impedir que los productos viejos o vencidos se conviertan en nuestros enemigos.
Cuando el maquillaje pierde su calidad y se llena de bacterias, comienza a dañar la piel y los ojos. Causa infecciones.
Para darte cuenta de cuándo debes renovar tus cosméticos, debes observar su apariencia. Revisar si ha perdido el color o tiene un olor distinto. Si te ha causado algún daño definitivamente debes cambiarlos.
Las máscara de pestañas es uno de los cosméticos básicos que tenemos en nuestro kit de maquillaje. El inconveniente con este producto es que solemos utilizado por mucho tiempo. Y sin darnos cuenta termina perjudicando la salud de los ojos. Causa abscesos, caída de pestañas e inclusive lesiones.
Prevención con las bacterias
En la piel del rostro, sobre todo el área de los párpados, residen diferentes tipos de bacterias (Staphylococcus aureus, Streptococcus pneumoniae, y Pseudomonas aeruginosa) que se incrustan en el cepillo de la máscara de pestañas siempre que la aplicamos. Cuando se guarda en el tubo, se amontonan y se combinan con el maquillaje.
Entre los inconvenientes que consigue producir, indican los especialistas, están:
- Padecimiento del ojo seco.
- Blefaritis que es una hinchazón de los párpados.
- Caída de pestañas.
- Abscesos, conjuntivitis y úlceras corneales.
Si se sufre cualquier contrariedad, lo sugerido es visitar al especialista prontamente. Asimismo, conseguimos prevenirlo con algo tan simple como renovar habitualmente el producto. Evitar el hábito de conservarlo en el bolso hasta que se seque o se termine la pintura.
La sugerencia de la Academia Americana de Oftalmología es no emplear máscaras durante más de tres meses. Y cuando se ha olvidado cuándo se comenzó a usar, lo más sano es sustituirla.
Evitar compartir nuestra máscara con otras personas, según el oftalmólogo. Ya que esto acrecienta el peligro de contaminación y el contagio de infecciones y enfermedades.
Se debe prestar extrema atención a las máscaras que dicen a prueba de agua. Ya que sus fórmulas contienen ceras y alquitranes que repelen el agua de las pestañas e impiden que se corra la pintura.
Al emplearla sobre los lagrimales conseguimos obstruirlos y agrandar las posibilidades de sufrir sequedad en el ojo o inflamación en los párpados.
Cosas que debemos evitar cuando usamos máscaras para pestañas
Además de cambiar el producto con constancia, especialistas sugieren evitar ciertas acciones para minimizar los peligros al utilizar la máscara de pestañas:
- Pretender recuperarla cuando está seca utilizando agua o aceite. Lo conveniente es cambiarla por una nueva.
- Intercambiar el cepillo de una máscara con otra.
- Retirar el exceso de máscara del cepillo con un pañuelo de papel o una toallita.
- Utilizar el cepillo de la máscara para peinar las cejas.
- Frotarse los ojos con la máscara puesta. Irse a dormir sin desmaquillar.
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