¿Como nos cura la psicología ambiental?

Psicología ambiental
Psicología ambiental

¿Cómo nos cura psicológicamente el paisaje? Desde el siglo pasado, fue denominada psicología ambiental, que estudia la interacción que se origina entre el comportamiento humano y el medio ambiente. Así, el ruido, la densidad de población, la calidad del aire, clima, se han distinguido como primordiales elementos en la conducta humana.

El psicólogo Kart Lewin (1890-1947) fue uno de los precursores en ocuparse de la relación entre los seres humanos y el medio ambiente. Su propósito fue establecer la influencia que la naturaleza causa en las personas; así como la manera en que la persona actúa, reacciona y se organiza dependiendo de su hábitat.

Sin embargo, no fue hasta los años 60, donde la psicología comenzó a estudiar esa realidad: ambiente-persona. Nació así lo que hoy llamamos psicología ambiental. Desde ese momento dos son los temas esenciales de los especialistas en esta materia: la influencia del medio ambiente sobre el estado psíquico de las personas; y la influencia de éstas sobre la naturaleza. Es decir, el factor humano como gran potenciador, para bien o para mal, de las posibilidades del entorno.

La psicología ambiental es el estudio de la conducta humana en relación con el medio ambiente ordenado y definido por el hombre
La psicología ambiental es el estudio de la conducta humana en relación con el medio ambiente ordenado y definido por el hombre

Psicología ambiental

De tal modo, la psicología ambiental es el estudio de la conducta humana en relación con el medio ambiente ordenado y definido por el hombre. La convivencia ambiental es determinada por Felles María “como el sistema de vivencias, conocimientos y experiencias que el individuo utiliza activamente en su relación con el medio ambiente”.

En la Naturaleza no hay “buenos” ni “malos”. Todo está al servicio del universo, en general. Tanto el águila imperial, como el pajarillo del bosque, o el gusano de seda. Todos son precisos para mantener el equilibrio ecológico.

Cada uno de nosotros tenemos una misión que cumplir en este gran universo que es la tierra. Nadie es indispensable, pero todos somos precisos para que el universo humano siga más allá. El gran desafío es que cada uno de nosotros debe hallar su sitio y comenzar a transformar su propia felicidad, ya sea en el campo o en la gran ciudad.

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