La terapia sexual es un enfoque especializado que está tomando mucha popularidad dentro de la terapia de pareja en Madrid o en cualquier parte del mundo, y se centra en abordar problemas específicos relacionados con la intimidad y la satisfacción sexual. Ya está, más que demostrado que la salud sexual es un aspecto fundamental de la vida en pareja, y tener una vida sexual saludable y satisfactoria puede contribuir en gran medida al bienestar emocional y a la calidad de las relaciones. De acuerdo a un estudio realizado en 2017, la satisfacción sexual está estrechamente relacionada con el bienestar general de la relación, y las parejas que informan tener una vida sexual plena tienden a experimentar una mayor felicidad en sus relaciones.
Sin embargo, también es común que las parejas enfrenten desafíos en su vida sexual a lo largo del tiempo. Las causas pueden ser variadas, como el estrés, los cambios en la salud física y mental, los desafíos en la comunicación o las expectativas no cumplidas en cuanto a la intimidad. De hecho, se estima que aproximadamente el 31% de los hombres y el 43% de las mujeres experimentan algún tipo de disfunción sexual en algún momento de sus vidas.
La terapia sexual en pareja entonces, surge como una herramienta útil para abordar estos problemas y mejorar la calidad de la vida de los pacientes. Al trabajar con un terapeuta especializado en sexualidad, las parejas pueden aprender a comunicarse mejor sobre sus necesidades y deseos sexuales, explorar soluciones a los desafíos que enfrentan y mejorar su conexión emocional y físico en el ámbito íntimo.
En este artículo, queremos darle énfasis a la importancia de la intimidad y la satisfacción sexual en las relaciones, los problemas sexuales comunes que enfrentan las parejas y cómo la terapia sexual en pareja puede ser de gran ayuda.
¿Cuál es la importancia de la intimidad y la satisfacción sexual en una relación?
Muchas personas, incluso en esta era tan libre, con tanta información disponible, y donde se está permitiendo o la diversidad sexual, todavía tratan los temas íntimos como algo prohibido o de tabú. Lo peor de todo es que, esto ocurre muy frecuentemente dentro de su propia relación sentimental, cosa que posiblemente sea uno de los factores principales por lo que los matrimonios fracasan.
Lo cierto es que, la intimidad y la sexualidad son claves para cualquier pareja. Primero, desde un punto de vista psicológico, permiten tener una conexión emocional sólida. Disfrutar de un acto sexual fructífero, otorga un sentimiento de seguridad y pertenencia, lo que ayuda a fortalecer los vínculos entre los individuos en una relación.
Algunos estudios sugieren que la satisfacción sexual puede mejorar la comunicación, la confianza y el compromiso en una pareja. Además, también pueden contribuir al bienestar emocional individual, ya que se ha demostrado que las personas sexualmente satisfechas reportan niveles más altos de autoestima y menores niveles de ansiedad y depresión.
Desde el punto de vista físico, la intimidad también nos regala muy buenos efectos positivos en la salud en general. El sexo regular y placentero puede contribuir a la liberación de hormonas como la oxitocina, conocida como la “hormona del amor”, que ayuda a reducir el estrés y promover la relajación. También puede mejorar la función cardiovascular, fortalecer el sistema inmunológico y, en algunos casos, aliviar el dolor.
Cabe destacar que la satisfacción sexual no solo se trata del acto en sí, sino también de la capacidad de comunicarse abierta y sinceramente sobre las necesidades y deseos sexuales con la pareja. La comunicación efectiva puede conducir a una mayor comprensión y aceptación de las diferencias individuales y a una mayor satisfacción en la relación en general.
Problemas sexuales comunes que afectan a las parejas
El mal sexo o la falta intimidad, puede tener un impacto negativo en la estabilidad de las parejas, ya que la insatisfacción puede generar frustración, resentimiento y disminuir la conexión emocional entre los individuos. Además, puede aumentar el riesgo de problemas de comunicación, infidelidad y, en última instancia, la disolución de la relación.
Algunos de los problemas sexuales comunes que afectan a las parejas incluyen:
- Disfunción eréctil: dificultad para lograr o mantener una erección suficiente para el coito.
- Eyaculación precoz: eyaculación que ocurre antes o poco después de la penetración, causando insatisfacción sexual.
- Dificultad en la excitación o el orgasmo: incapacidad o dificultad para experimentar el placer sexual y alcanzar el clímax.
- Dispareunia: dolor durante el coito, que puede afectar tanto a hombres como a mujeres.
- Vaginismo: contracción involuntaria de los músculos vaginales que impide la penetración y causa dolor.
- Deseo sexual hipoactivo: disminución del interés en la actividad sexual, lo que puede generar tensiones en la relación.
- Desajustes en la frecuencia sexual: diferencias en la cantidad de sexo deseado por cada individuo en la pareja, lo que puede conducir a conflictos y descontento.
¿Cómo puede la terapia sexual en pareja puede ayudar a fortalecer una relación?
No cabe duda que la terapia sexual puede ser una parte importante de la terapia de pareja, ya que aborda específicamente los problemas sexuales que pueden estar afectando la calidad y la estabilidad de la relación. Estos tratamientos sexuales pueden ayudar a las parejas de diversas maneras.
A continuación, los factores más importantes tratados en una terapia sexual en pareja:
- Mejora de la comunicación: es una excelente manera de fomentar la comunicación sincera sobre las necesidades y deseos sexuales, lo que puede ayudar a resolver malentendidos y a desarrollar una mayor comprensión y aceptación de las diferencias individuales.
- Identificación y tratamiento de problemas sexuales específicos: los terapeutas sexuales pueden ayudar a identificar y tratar problemas sexuales específicos, como la disfunción eréctil, la eyaculación precoz, la dispareunia, entre otros, mediante la implementación de estrategias terapéuticas y, en algunos casos, tratamientos médicos.
- Educación sexual: este tipo de terapias proporcionan información precisa y actualizada sobre la sexualidad humana, la anatomía y la fisiología sexual, y las técnicas sexuales que pueden mejorar la satisfacción y el placer en la relación.
- Fortalecimiento de la conexión emocional: al abordar y resolver problemas sexuales, las parejas pueden experimentar una mayor intimidad emocional y un vínculo más profundo, lo que puede mejorar la calidad y la duración de la relación.
- Aumento de la autoestima y la confianza en sí mismo: puede también aumentar la autoestima y la confianza en sí mismo, lo que puede tener un impacto positivo en la relación en general.
- Desarrollo de habilidades de resolución de conflictos: es un mecanismo que permite a las las parejas desarrollar habilidades de resolución de conflictos y estrategias de afrontamiento que pueden ser útiles no solo para abordar problemas sexuales, sino también para manejar otros desafíos que puedan enfrentar en su relación.
- Prevención de futuros problemas: por último, proporciona a las parejas las herramientas y el conocimiento necesarios para prevenir futuros problemas sexuales y mantener una relación sexual saludable y satisfactoria a lo largo del tiempo.
Como hemos visto, la terapia sexual en pareja es una excelente herramienta que puede ayudar a millones de parejas a salvar su relación y a incrementar la satisfacción general de la vida íntima, que como ya hemos repetido en par de ocasiones, es un componente esencial en la humanidad.
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