¿Cuantas veces vas caminando y te has torcido el pie? Seguramente no pasa del dolor del momento y ya, pero otras veces puede ocasionarse un esguince de tobillo. Debes saber que hacer cuando esto suceda para asegurar tu bienestar.
Los esguinces son una de las lesiones mas comunes, ya que se suscita en el momento en que el pie se tuerce o se gira mas allá de lo que anatómicamente es considerado normal lo cual causa que los ligamentos del tobillo se sobrecarguen o desgarren; en el peor de los casos, que se rompan los ligamentos.
Todas las personas están propensas a sufrir de un esguince de tobillo, ya sea atleta o no. Lo que determina la gravedad del esguince es la fuerza con que se genera la torcedura del tobillo. Se puede estar caminando, trotando, corriendo, saltando.
Un esguince de tobillo puede ser de mayor o menor grado
Al tener un esguince de tobillo los síntomas serán dolor, inflamación, incapacidad para mover el pie, así como de caminar. Según haya sido el daño los esguinces se clasifican en tres tipos:
Grado I o leve, cuando el ligamento solo sufrió un estirón. Normalmente solo dolerá al momento y no tendrá mayor implicación.
Moderado o grado II, si el ligamento se sobrecargo o esta parcialmente roto. Experimentaras dolor, algo de inflamación y hematoma en la zona del tobillo. Deberás tomar algunas medidas como inmovilizar, reposo, colocar hielo y tomar antiinflamatorio.
Grado III o severo, el ligamento esta completamente desgarrado. En este caso lo mejor es acudir al medico que realice una placa y descarte no haya habido fractura también. La inflamación será pronunciada, así como el dolor y el hematoma.
Cuando una persona ha sufrido un esguince de tobillo, lo hace mas vulnerable a sufrir otro en algún momento de la vida. Es por ello que se debe tratar adecuadamente el esguince y ser precavido al realizar una actividad física o simplemente al caminar.
Evita complicar el esguince realizando actividades físicas que requieran de fuerza muy pronto, ya que puede generarse ciertas complicaciones:
- Dolor de tobillo crónico.
- Inestabilidad crónica de la articulación del tobillo.
- Artritis en la articulación del tobillo.
(Puedes leer también: El invierno y los ejercicios ¡no hay excusas para dejarlos!)