El yoga para niños ofrece muchos beneficios para ellos tanto a nivel físico como mental. Debemos conocer cuáles deben ser los primeros pasos en el aprendizaje de esta disciplina que debe enfocarse como un juego. Alrededor de los 4-5 años los niños ya pueden iniciarse en el aprendizaje del yoga adaptado a la etapa inicial.
Lo más destacado en esta disciplina es la relajación, una mayor concentración, autocontrol y dominio corporal. Esta es una disciplina en la que muchos adultos ya son adictos. Incluso hombres y mujeres que lo practicaba antes de ser padres continúan haciéndolo con sus bebes de pocos meses.
Yoga para niños. Excelentes aprendices
Los niños son más flexibles corporal y mentalmente y es por eso que son potencialmente excelentes aprendices del yoga. Es buena opción ofrecerles a los niños el bienestar que proporciona esta práctica en edades tempranas porque es en esta etapa donde se establecen hábitos y conductas que marcaran su personalidad.
Según Almudena Ovejero quien es especialista en yoga para niños, la edad ideal para que los niños practiquen yoga es a partir de los 4-5 años. Con adaptación a las clases según su edad.
Dentro del mundo del yoga existen diferentes modalidades. Entonces surge una pregunta ¿en cual podemos apuntar a nuestros hijos? Almudena nos aclara que cualquier tipo de yoga puede ser beneficioso para los niños. Por supuesto que deben ser guiados por un profesional cualificado que sepa escuchar y atender las necesidades del niño.
Al comenzar el aprendizaje debe ser como un juego, descubriendo y conociendo su propio cuerpo, a asociar las posturas con los distintos elementos de la naturaleza como animales y plantas. También deberán aprender a trabajar la coordinación a través de bailes y danzas del mundo en grupo; desarrollar la creatividad con el trabajo de mandalas, la relajación a través de la visualización, cuentos, mantra, etc.
Al escoger el estilo de yoga los pequeños se irán beneficiando de sus efectos positivos.
