Desde hace algunos años la cáscara del huevo ha ido ganando popularidad como un ingrediente que podría ser bastante milagroso en el terreno nutricional. Sin embargo desde algún tiempo al parecer esta moda se ha establecido mucho más; ahora, cada vez son más las personas que están optando por probarla y aprovechar todas las potencialidades que pueda tener.
[su_heading size=”16″]Entre las propiedades que se le achacan resalta sobre todo la capacidad de proteger los huesos ante diferentes enfermedades degenerativas como la osteoporosis, esto gracias a contiene grandes concentraciones de calcio.[/su_heading]
La cáscara del huevo y la salud de los huesos
La cáscara del huevo, aunque no lo parezca es una membrana que está cubierta por más de 17 mil poros que permiten el paso del aire. El principal ingrediente que la compone es el carbonato cálcico, cerca del 95% del total; además contiene colágeno y queratina pero en menores cantidades, claro está.
De hecho, la cáscara del huevo ha sido objeto de diferentes estudios. Uno realizado en Argentina en 2013 estableció que únicamente media de estas le aporta al organismo la mitad de la cantidad de calcio que necesita cada día. Mientras que otro mostraba los beneficios que puede tener en las mujeres con problemas de osteoporosis después de la menopausia; entre ellos aumentar la densidad ósea.
Como es un elemento tan delicado por la vulnerabilidad que representa con diferentes tipos de bacterias; hay que tomar las medidas higiénicas correspondientes, ya que la cáscara de huevo puede tener presente la bacteria de la salmonela.
Los especialistas esperan que con el paso del tiempo; estudios clínicos relacionados con este ingrediente permitan su fabricación y comercialización a nivel industrial. Pudiendo diseñarse fácilmente un suplemento alimenticio en forma de polvo, hecho a base de éstas. Esto facilitaría su consumo añadiéndolo a distintas preparaciones, por ejemplo.
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