Poder escoger refrigerios y bebidas saludables para nuestros hijos podría ser un gran reto porque estamos rodeados de mucha variedad. Conozcamos algunos de esos alimentos que le aportarán mejores beneficios a la salud de sus hijos.
Refrigerios y bebidas. Llenas de vitaminas y bajas en calorías y grasas
Una buena opción son las frutas y las verduras llenas de vitaminas y bajas en calorías y grasa. Hay algunas galletas y quesos que pueden ser también buenos refrigerios. Algunas de estas opciones podrían ser: las manzanas, los bananos, frutas picadas en yogurt, vegetales crudos con hummus, zanahorias, arvejas dulces, entre otras.
Los refrigerios puedes llevarlos en un bolsillo o morral si los pones en una bolsa plástica pequeña. En ellas te será más fácil poner los refrigerios porque te ayudará a darle a tu hijo la porción de tamaño apropiado. Trate de no incluir la comida chatarra u otros refrigerios malsanos.
El que su hijo consuma un refrigerio malsano de vez en cuando no es problema la clave está en el equilibrio. Otra sugerencia importante es que sus hijos beban mucha agua. Evite las bebidas gaseosas, para deportistas y las aguas saborizadas en especial las preparadas con azúcar o jarabe de maíz. Estas bebidas tienen muchas calorías y pueden ocasionar aumento de peso incluso en niños activos.
Es aconsejable que los niños entre 2 y 8 años tomen aproximadamente dos tazas de leche al día. En cuanto a los niños mayores de 8 años lo ideal son unas 3 tazas diarias que representan unos 720 mililitros. Puede servir la leche con las comidas y agua entre las comidas y con los refrigerios.
Otros consejos que puede tomar:
- Trate que el tamaño del refrigerio sea el más adecuado para su hijo.
- Procure que los refrigerios sean frutas, verduras y granos integrales.
- Incluya alimentos que sean bajos en grasa y azúcar y ricos en fibra y agua.
Si tiene problemas en conseguir refrigerios saludables hable con un nutricionista o su médico de familia.
