¿Has viajado recientemente y llegaste quebrantado?, ¿Crees que fue el cambio de clima o un contagio directo? Aunque no lo creas viajar representa un foco principal de contraer enfermedades.
No te escandalices pero es la realidad. Visitar otros países conlleva esa carga, traer nuevas enfermedades. Sin embargo, son los aeropuertos del mundo que sirven de encovadura.
Imagina que a diario millones de personas pasan por allí, dejando todo tipo de bacterias. Existen equipos que detectan el transporte de drogas pero hasta ahora solo un formulario nos separa de estar en riesgo de salud.
Sí, un formulario. El mismo que llenamos antes de montarnos en un avión explicando que no portamos ninguna enfermedad. Pero puede que esto no funcione muy bien.
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Enfermedades viajan a nuestro lado
Para muestra, solo debemos pensar en cómo el ébola llegó a tantos países. O como la gripe H1N1 contaminó América en tiempo récord. Esta es la preocupación del equipo de Fraunhofer Institute for Cell Therapy and Immunology en Leipzig.
Quienes diseñan una máquina capaz de determinar a través del aliento de los pasajeros las infecciones que tienen. Basándose en la tecnología para la detección de drogas. Y la separación de iones, creen lograrlo.
Según su investigación estaríamos ante un equipo que puede separar las partículas de iones, y dar respuestas de las enfermedades. Tan solo con pedir al pasajero soplar se tiene la respuesta. Algo parecido al alcoholímetro.
La separación se llevará a cabo a través de la cromatografía de gases. Para luego con el espectrómetro de iones determinar la movilidad. Por el movimiento los expertos sabrán qué tipo de enfermedad es portada.
Esperan que no solo pueda ser utilizado en los aeropuertos. Su eficaz tecnología puede tener valiosos aportes en la medicina modernas. Así que pronto irás a una clínica o hospital y ser diagnosticado por tu aliento.
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