¿Sabes qué es la vulvodinia? Quizá nunca has escuchado esta palabra, que puede ser un poco complicada de pronunciar. La vulvodinia es una enfermedad que rara vez afecta a las mujeres y que puede confundirse, en principio, con la vaginismo.
Se trata de un dolor crónico en la vulva y sus causas no han sido especificadas aún. Expertos señalan que la afección puede durar de tres a un año si la mujer no recibe atención médica. El malestar puede ser tan intenso incluso hasta sentada y también puede hacer que te resistas a tener relaciones sexuales.
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El ardor constante en la abertura de la vagina es una de las características. El Centro de Obstetricia y Ginecología de Estados Unidos afirma que la causa no está asociada a infecciones o un trastorno de la piel. Entre las posibles causas se encuentran la irritación de los nervios de la vulva, los cambios hormonales o la piel sensible.
Conoce los tipos de vulvodinia
Los especialistas que han trabajado sobre este tema han identificado dos tipos de vulvodinia. El primero de ellos es la generalizada y el segundo la localizada. Para ambos casos hay tratamiento médico que ayuda a mejorar los síntomas y hacer que la paciente tenga más calidad de vida.
La vulvodinia generalizada se presenta en distintas áreas de la vulva y puede causar dolor en distintos momentos. El tejido de esta zona puede verse inflamado o hinchado, por eso es que es importante la observación constante.
Por su parte, el segundo tipo refiere a la presencia de dolor un área específica. Puede confundirse con ardor y la afección se hace más intensa cuando se aprieta la zona. Es probable que la mujer ni siquiera soporte usar ropa íntima o un pantalón.
¿Qué debes hacer?
A veces, por pena o miedo, las mujeres prefieren no hablar sobre el tema. Pero lo cierto es que esta es una enfermedad bastante común y que tiene solución. Es por ello que ante la aparición del primer síntoma o ante la sospecha de este, pues acudas al ginecólogo.
El médico te hará una rutina de exámenes para descartar cualquier otra patología. Una vez que tenga los resultados de esos análisis te prescribirá el medicamento adecuado. Previo a la consulta, evita la automedicación pues podrías ocasionar un daño mayor.
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